26 abril 2006

La Jihad Global - La conexión yemení

LA JIHAD GLOBAL - LA CONEXIÓN YEMENÍ
20 de Marzo de 2006

Fuente: Asaf Maliach, ICT

Decenas de miembros de Al Qaeda están actualmente en juicio en Yemen bajo la sospecha de planear y cometer ataques terroristas contra objetivos yemeníes oficiales y contra objetivos occidentales dentro de Yemen y en el extranjero. Lamentablemente, la fuga de 23 miembros de al Qaeda de la prisión de máxima seguridad en Sana a comienzos de Febrero ensombrece este importante capítulo en la guerra contra el terrorismo.

 
El siguiente artículo examina la conexión yemení con la red mundial de terrorismo, la participación de voluntarios islámicos yemeníes en la guerra en Irak, y las medidas tomadas por el gobierno de Yemen para combatir este terrorismo. Además, sigue las pistas de los recientes progresos en los juicios a miembros de al Qaeda.

 
La guerra civil afgana

 
Yemen del Norte, gobernada por el presidente 'Ali 'Abdullah Salih, fue una de las principales fuentes de voluntarios para la Jihad afgana durante la década de 1980. Por el contrario, el marxista Yemen del Sur, bajo el liderazgo del Partido Socialista Yemení, se alineó con el régimen comunista titular en Afganistán y concentró toda su energía en impedir el embarco de voluntarios yemeníes a Afganistán. El periódico británico Jane´s Intelligence Review calcula que unos 3000 voluntarios yemeníes participaron en la guerra en Afganistán, de los cuales algunos tomaron parte en el combate real mientras que otros ayudaron internamente. [1]
A diferencia de Egipto, Yemen del Norte –y más tarde la República Unida del Yemen (a partir de mayo de 1990)- recibió con los brazos abiertos a sus hijos, los ex alumnos afganos que deseaban regresar a casa tras el final de la guerra y la caída del régimen comunista en Kabul en 1992. Los yemeníes que regresaban encontraron refugio en el partido de oposición de orientación islámica, el Partido Islah Yemení, cuyas raíces pueden rastrearse hasta la confederación tribal Hashid en Yemen del Norte, encabezada por el Sheik 'Abd al-Majid al-Zindani, también ex alumno afgano y compañero de 'Abdullah 'Azzam y Osama bin Laden. En 1993, al-Zindani entró en la política y, tras las elecciones parlamentarias de ese año, se convirtió en miembro del unificado gobierno yemení. Yemen también constituía una estación de tránsito para varios ex alumnos afganos (entre ellos, muchos egipcios) que deseaban retornar a sus tierras después de la guerra. Oficiales de alto rango en Yemen y en Egipto reconocieron que durante 1993 varios líderes egipcios de ex alumnos afganos residieron en Yemen y estuvieron involucrados en los intentos de asesinato del Primer Ministro egipcio 'Atef Sidqi en noviembre de 1993 y del Presidente Hosni Mubarak en su visita a Etiopía en junio de 1995. [2]
El estallido de la guerra civil en la República Unida del Yemen en junio de 1994 colocó a los ex alumnos afganos del lado del gobierno de Sana (antes de Yemen del Norte), encabezado por el Presidente 'Ali 'Abdullah Salih. Este grupo guardaba un intenso odio hacia el marxismo y el comunismo, y prestó su ayuda para derrocar al “infiel” régimen musulmán-marxista que gobernaba la región meridional de la República Unida. El Sheik Tariq al-Fadli, jefe de la organización Jihad Islámica yemení (e hijo adoptivo de al-Zindani), reveló que Osama bin Laden financiaba parte de las operaciones de asesinatos contra los principales marxistas yemeníes, y que en la década de 1980, fue parte de la idea de derrocar al régimen del Yemen del Sur.[3]
Durante el decenio de 1990, además de subsidiar las actividades terroristas dentro de Yemen, principalmente para acabar con la presencia extranjera en el país, bin Laden estableció en Sa´da (norte de Yemen) varios campos de entrenamiento para miembros de al Qaeda y otros fundamentalistas islámicos yemeníes, sauditas, iraquíes, egipcios, libios y jordanos. También donó fondos para el establecimiento de la Universidad Islámica en Ta´iz y estableció fuertes lazos con Tariq al-Fadli, ´Abd al-Majid al-Zindani, y otros líderes radicales islámicos, muchos de los cuales había conocido durante la guerra en Afganistán. [4]
La organización del Sheik Tariq al-Fadli asesinó a numerosos miembros de alto rango del Partido Socialista Yemení tras la unificación de Yemen, y estuvo involucrada en los ataques terroristas de diciembre de 1992 contra dos hoteles en Adén que alojaba a soldados americanos. Fadli también formó parte de la política yemení después de unirse al partido gobernante encabezado por 'Ali 'Abdullah Salih.[5]
En los años posteriores, la calma volvió a la sociedad yemení y parecía que el factor del fundamentalismo islámico había dejado de representar una sustancial amenaza para el orden existente. Sin embargo, el gobierno de Sana rehusó satisfacer dos de las principales demandas de los ex alumnos afganos: que se les permitiera enlistarse en el ejército yemení y que se les garantizara libertad de acción en el sur de Yemen. Como resultado de la negativa del gobierno a responder a sus demandas, en julio de 1994 estalló un cruento combate entre los ex alumnos afganos y las fuerzas gubernamentales en la ciudad portuaria de Adén. Derrotados los milicianos, fueron arrestados o expulsados de Yemen.
En los siguientes dos años, aquellos que pudieron evadir las fuerzas de seguridad establecieron el Ejército Islámico de Adén-Abyán, liderado por Zayn al-'Abidin al-Mihdar, otro ex alumno afgano. Esta organización se proclamaba a sí misma como la heredera de la Jihad Islámica Yemení y una aliada clave de Osama bin Laden. Sus miembros establecieron campos de entrenamiento en la provincia de Abyán, en el sur de Yemen, e hicieron un llamamiento para la creación de un Califato Islámico en Yemen y la expulsión de la presencia americana y británica de la Península Arábiga en general y de Yemen en particular. El Ejército de Adén-Abyán instigó el secuestro y los ataques terroristas contra extranjeros en Yemen para liberar a sus compañeros en prisión, perjudicar la economía nacional (que se basa en el turismo) y para expulsar a los extranjeros del país.
El Ejército Islámico de Adén-Abyán también colaboró con al Qaeda en el ataque suicida con bombas contra el USS Cole en octubre del 2000 en el puerto de Adén, un ataque que mató a 17 soldados de la Marina norteamericana además de los dos suicidas, ambos ex alumnos afganos. El Ejército Islámico de Adén-Abyán recibía apoyo financiero de Abu Hamza al-Masri, líder de los musulmanes británicos, y de Osama bin Laden, [6] quien ya en su declaración de guerra del 23 de agosto de 1996 afirmaba que la presencia de los muyaidines en el sur de Yemen representaba una amenaza estratégica para la “alianza de la cruzada sionista” en la región. [7]
El rol de los voluntarios yemeníes en la insurgencia en Irak
Khaldoun al-Hakimi, un residente de Adén de 29 años, fue uno de los diez sospechosos claves implicados en los ataques terroristas contra el USS Cole en octubre del año 2000. El 11 de abril de 2003, se escapó de la prisión en su ciudad, fue recapturado, encarcelado por ocho meses y luego liberado. El 19 de julio de 2005 perpetró un ataque suicida contra las fuerzas de coalición en Irak. Un día antes del ataque, otro residente de Adén, Salih Mana, de 28 años, cometió un ataque suicida parecido en Irak. [8] El 1 de noviembre de 2005 las fuerzas aliadas arrestaron a dos ciudadanos yemeníes que se encontraban en una misión de reconocimiento de inteligencia para al Qaeda en el sur de Bagdad. [9]
Los oficiales de inteligencia norteamericana confirmaron que voluntarios musulmanes yemeníes formaron parte de la insurgencia iraquí organizada en oposición a las fuerzas americanas en Irak, junto con voluntarios de Arabia Saudita, Jordania, Siria, Líbano y otros países alrededor del mundo (incluyendo a algunos ex Alumnos Afganos). Estos voluntarios, que llegaron a Irak antes y después de la invasión conducida por los americanos, se preparaban en campos de entrenamiento en Irak, algunos situados cerca de Bagdad. [10]
Un reciente estudio dirigido por Anthony Cordesman, del Center for Strategic and International Studies encontró que un 17% de los combatientes extranjeros en Irak son ciudadanos de Yemen. Esta figura no incluye a los combatientes de otras nacionalidades que fueron entrenados en Yemen. Según el periódico Al-Thawry, veinte ataques suicidas con bombas fueron cometidos por yemeníes en Irak. [11]
Tanto en el caso de Afganistán, como en el de Irak, los clérigos musulmanes desempeñaron un papel decisivo en el reclutamiento de voluntarios para la Jihad. Una eminente figura yemení que facilitó la llegada de voluntarios musulmanes en general (y particularmente yemeníes) a Irak fue el Sheik 'Abd al-Majid al-Zindani,[12] jefe de la confederación tribal Hashid del norte de Yemen, cabeza del Consejo de la Shura (asesor) del Partido Islah Yemení, miembro de la Hermandad Musulmana y fundador de la Universidad religiosa al-Iman en Sana. Como se mencionó anteriormente, 'Abd al-Majid al-Zindani era amigo íntimo de 'Abdullah 'Azzam y de Osama bin Laden. También era conocido como un importante recolector de voluntarios y de fondos para la Jihad afgana. Actualmente, los Estados Unidos y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas exigen a Yemen que lo arreste y confisque sus bienes, pero hasta el momento todo ha sido en vano.[13]
Una oportuna base operativa para veteranos de al Qaeda e Iraquíes[14]
Lo que Osama bin Laden vio en Yemen (particularmente en el sur de Yemen) como de importancia estratégica en la guerra contra la “alianza de la cruzada sionista” fue ilustrado en una serie de acusaciones dirigidas recientemente a una corte yemení en un juicio a miembros de al Qaeda. Las acusaciones detallan un conjunto de ataques terroristas perpetrados por los acusados dentro y fuera de Yemen en años recientes, y también ataques en etapa de planificación.
El 8 de agosto de 2005, seis meses antes de la serie más reciente de juicios, una corte yemení sentenció a seis miembros del grupo “Kata´ib al-Tawheed” (“brigadas de la unificación”) de al Qaeda a entre dos y cuatro años de prisión. Los hombres, un iraquí, tres yemeníes y dos sirios, fueron declarados culpables de planear ataques contra las embajadas italianas y británicas, además del Centro Cultural Francés en Sana. Otros dos acusados yemeníes fueron absueltos debido a la falta de evidencias. Según la acusación, el grupo también planeaba atacar varias bases militares en Arabia Saudita, ciudadanos americanos, compañías occidentales, restaurantes y escuelas en Bahrein, Kuwait, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos.[15]
El 14 de febrero de 2006, comenzó el juicio de Ghalib al-Zaydi, de 28 años, y Muhammad Hamdi al-Ahdal (Abu´Asim al-Macci), de 35, en Sana. Al-Ahdal, un yemení de origen saudita que se desempeñó como contador de al Qaeda en Yemen, era uno de los conspiradores en los ataques al USS Cole. La acusación afirma que Al-Ahdal (considerado el número dos de al Qaeda en Yemen después de Abu 'Ali Qa'id Sinan al-Harithi) recibió sumas de $44,000 y 1,061,500 Saudi Riyal de Kamal Abu Hijazi, anterior contador de al Qaeda en Yemen, uno de los miembros de más alto rango de la organización. Además, Abu 'Ali al-Harithi le transfirió a al-Ahdal 50,000 Saudi Riyal recibidos de Osama bin Laden, supuestamente para adquirir armas y materiales explosivos para cometer ataques terroristas en Yemen.
Al-Ahdal, quien admitió recibir grandes sumas de dinero de “agentes externos”, negó que el dinero estuviera destinado para operaciones terroristas. Afirma que cada tres meses transfería dinero a familias yemeníes cuyos hijos habían estaban encarcelados en Yemen o en Guantánamo, y a familias cuyos hijos fueron asesinados durante la guerra civil yemení de 1994 o en las guerras de Afganistán, Chechenia y Bosnia Herzegovina. También se acusa a al-Ahdal de la recolección de fondos para la actividad terrorista de al Qaeda en Yemen, entre otros, bajo el pretexto de donaciones para la Caucasus Charitable Society que él mismo encabezaba.[16] Al-Ahdal también está siendo juzgado por la muerte de 19 militares yemeníes y personal de seguridad y las heridas a otros 29, además de destrucción de propiedad, todo lo cual ocurrió mientras él huía, entre los años 2000 y 2003.[17]
El 14 de febrero, comenzó otro juicio en Sana, esta vez de tres ciudadanos yemeníes extraditados desde los Estados Unidos tras estar encarcelados en Guantánamo por más de tres años y medio. Los tres estaban acusados de ayudar a miembros de al Qaeda en la falsificación de pasaportes y documentos de identidad, pero fueron liberados después de que el juez determinara que sus sentencias habían sido cumplidas suficientemente en la prisión americana. [18]
El 22 de febrero, también en Sana, 17 personas (12 yemeníes y cinco sauditas) fueron a juicio bajo los cargos de ser enviados por Abu Mus'ab al-Zarqawi a cometer ataques contra objetivos occidentales y contra personalidades yemeníes y americanas en Yemen entre los años 2004 y 2005. [19] El grupo supuestamente intentaba, entre otras cosas, asesinar al embajador de los Estados Unidos en Sana, Thomas Krajeski, asesinar al presidente yemení 'Ali 'Abdullah Salih y bombardear un hotel en la ciudad portuaria de Adén (probablemente el Hotel Sheraton). [20]
La acusación afirma que los acusados fueron encontrados en posesión de una significativa cantidad de armas, incluyendo un fusil de asalto Kalashnikov, un lanzacohetes RPG, un lanzacohetes Bazooka y misiles antitanques. También encontraron material explosivo, componentes electrónicos destinados a detonaciones de largo alcance, una computadora, tres notebooks, grandes sumas de dinero y documentos falsificados para usar durante su estadía en Yemen y la comisión de ataques. [21] Dos de los acusados argumentaron que las armas y el equipamiento encontrado en sus departamentos eran usados para entrenar a jóvenes combatientes antes de unirse a la Jihad en Afganistán e Irak. [22]
Algunos de los acusados admitieron haberse infiltrado en Irak y tomado parte en ataques contra objetivos americanos, pero negaron toda participación en un grupo organizado y armado dentro de Yemen. Además, varios miembros del grupo están acusados de reunirse en Irak, donde recibieron sus pasaportes y documentos de identidad falsos, tras lo cual se trasladaron a Siria, que funcionaba como una estación de paso en su regreso a Yemen. Los acusados afirmaron que usaron documentos de identidad falsos por el temor de ser arrestados al regresar de Irak. Durante su declaración, 'Ali 'Abdullah Naji al-Harithi (Abu 'Ali), líder del grupo, argumentó que regresó de Irak con los componentes electrónicos incautados que se encontraron en su posesión a raíz de la declaración del candidato presidencial de los Estados Unidos John Kerry acerca de que los Estados Unidos atacaría a Arabia Saudita y Yemen inmediatamente después de terminar la guerra en Irak. Sostuvo que el fracaso de Kerry en las elecciones presidenciales lo llevó a pasar los componentes al jefe del aparato de seguridad nacional yemení, Ghalib al-Qamsh. Por el contrario, al-Harithi (también conocido como “Pequeño Abu ´Ali”) no estaba del todo influenciado por los resultados de las elecciones norteamericanas. Según su acusación, estaba determinado a vengar la muerte de Abu 'Ali Qa'id al-Harithi, líder de al Qaeda en Yemen y uno de los conspiradores del ataque suicida contra el USS Cole, quien fue asesinado en el desierto de Marib el 3 de noviembre de 2002 en un ataque norteamericano con misiles.[23]
Mientras tanto, el 27 de febrero 'Abed 'Abd al-Razzak Kamil, un estudiante de la Universidad religiosa de al-Iman, fue ejecutado por el asesinato de tres doctores misioneros americanos en el poblado de Jibla, al sur de Yemen, en diciembre de 2002. Aunque el gobierno yemení argumentó que Kamil no estaba directamente relacionado con al Qaeda, ellos señalaron que él abogaba por el apoyo a la organización y sermoneaba a los militantes de la Jihad. Junto con su compañero 'Ali Jarallah al-Sawani, ejecutado un poco antes ese mismo año, Kamil planeaba asesinar a eminentes figuras yemeníes y a extranjeros presentes en suelo yemení.[24]
La actuación de miembros de al Qaeda y Veteranos de Irak dentro de Yemen no habría sido posible sin el respaldo que recibieron de no pocos altos miembros del establishment de seguridad y militar yemení, y lo que es muy importante: el apoyo de la población local. Recientemente el comentarista militar James Dunnigan escribió que “Hay muchos simpatizantes de al Qaeda en el gobierno y las fuerzas armadas yemeníes”. Ahmad 'Abdullah al-Hasani, ex embajador yemení en Siria y antiguo comandante de la flota marina yemení, quien recientemente solicitó asilo político en Gran Bretaña, declaró que personajes de al-Qa'ida se desempeñan en cargos de alto rango dentro de las fuerzas de seguridad y militares yemeníes.[25]
Yasser al-Awadi, vicepresidente del bloque parlamentario del gobernante Partido del Congreso Popular General, dijo que los yemeníes son altamente simpatizantes de los milicianos por una cuestión de solidaridad musulmana y porque Occidente –en particular los Estados Unidos- ha socavado su reputación con políticas impopulares en la región. Citó la guerra en Irak, el conflicto Palestino-Israelí y la publicación de caricaturas del profeta Mahoma. Enfatizó que “Aún quienes no rezan abiertamente por el triunfo de Bin Laden sobre los americanos, lo hacen en sus corazones”. [26]
El gran escape
El 3 de febrero de 2006, veintitrés miembros convictos de al Qaeda escaparon de la prisión de máxima seguridad en Sana, probablemente con la ayuda de cuatro guardias, tras haber cavado un túnel subterráneo hasta la mezquita más cercana, donde los esperaban varios vehículos. Trece de ellos habían sido encarcelados por su participación en los ataques al USS Cole (octubre del 2000) y al buque petrolero francés Limberg (octubre del 2002). Para algunos de los fugitivos, este era su segundo intento de escape. Hasta ahora, solamente se han entregado cinco de ellos. [27]
El escape de la prisión fue una tremenda vergüenza para el régimen yemení. El Secretario de Prensa de la Casa Blanca Scott McClellan manifestó una gran decepción y prometió que los Estados Unidos y sus aliados no abandonarían la persecución de estos “peligrosos terroristas”.[28]
Un diplomático occidental (anónimo) señaló que el escape plantea dudas con respecto a la capacidad de decisión y de lucha contra el terrorismo islámico por parte del régimen yemení. Este oficial se agrega a otros oficiales de seguridad europeos y americanos al señalar que, si bien el régimen yemení ha declarado sus intenciones de luchar contra el terrorismo, en la práctica prefiere no entrar en una confrontación directa con los radicales islámicos. Esta postura puede verse en la limitada respuesta yemení al escape, la inadecuada cooperación con Interpol en la búsqueda de los fugitivos, y previamente en el desarrollo de un programa a través del cual los intelectuales religiosos musulmanes intentaban influenciar a los radicales prisioneros en Yemen para que se arrepintieran y adoptaran perspectivas más moderadas. En el marco del mismo programa, varios cientos de radicales fueron liberados, algunos de los cuales finalmente se ofrecieron como voluntarios para luchar en Irak.
Incluso otro diplomático, conservando también el anonimato debido a la gravedad del asunto, argumentó que aquellos mismos voluntarios más tarde regresaron Yemen y establecieron una red que reclutaba jóvenes yemeníes en varias mezquitas y universidades para la red mundial de la Jihad Islámica.[29]
Otras dudas con respecto a la resolución del régimen yemení para combatir al terrorismo salieron a la luz cuando se conoció que, de las 144 cuentas bancarias en Yemen pertenecientes a al Qaeda y al Talibán, solamente se congeló una. Las actividades financieras y propagandísticas de 'Abd al-Majid al-Zindani, considerado por los Estados Unidos el “Principal Terrorista”, no fueron bloqueadas ni siquiera después de que los americanos exigieran su arresto y la confiscación de sus bienes.[30]
Mientras tanto, Rashad al-'Alimi, vice primer ministro yemení, y ministro del interior, confirmó que Yemen está en posesión de 172 detenidos afiliados a al Qaeda, 34 de los cuales planeaban viajar a Irak. Al-'Alimi no mencionó si los 23 fugitivos están incluidos en los 172 prisoneros. Según él, recientemente Yemen extraditó a 69 sospechosos de terrorismo a Arabia Saudita, algunos de los cuales también planeaban viajar a Irak.[31]
Sumario y conclusiones

La conexión yemení con la red mundial del terrorismo islámico se retrotrae a casi dos décadas; sus raíces pueden trazarse hasta la guerra de Afganistán durante la década de 1980 entre los rebeldes afganos y el régimen comunista pro-soviético apoyado por las fuerzas militares soviéticas. Durante esta guerra, miles de voluntarios musulmanes de todas partes del mundo, especialmente de países árabes (incluído Yemen), llegaron para combatir junto a sus hermanos afganos. La guerra les sirvió a estos voluntarios como una universidad para el estudio del Islam radical, y los preparó, mental y físicamente, para la violenta confrontación con el “infiel” Occidente y con los regímenes musulmanes que cooperaban con él. La retirada soviética de Afganistán les “probó” que el poder de la fe en el Islam puede conquistar todas las otras formas de poder.

Los veteranos afganos regresaron a Yemen en los primeros años de la década de 1990, convencidos de sus capacidades de eliminar a los remanentes del régimen musulmán comunista en la región meridional de Yemen Unida y de expulsar la presencia extranjera del suelo yemení.

Formaron una alianza con el gobierno septentrional de Sana contra los remanentes del régimen comunista del sur, con la esperanza de que se les permitiera enlistarse en el ejército yemení y operar libremente en el sur de Yemen, para expulsar la presencia americana y británica de Yemen.

Después de que sus demandas fueron rechazadas, los Veteranos Afganos establecieron organizaciones radicales islámicas que comenzaron a socavar al régimen yemení y perpetraron ataques terroristas contra objetivos occidentales dentro de Yemen y contra las principales figuras yemeníes sospechadas de colaborar con Occidente. Al poco tiempo estas organizaciones empezaron a cooperar con al Qaeda e incluso recibieron apoyo financiero de su parte. La participación de voluntarios yemeníes en la guerra de Irak era solo una cuestión de tiempo. Igual que en Afganistán, los yemeníes constituyeron un componente significativo de voluntarios musulmanes en Irak. Sin embargo, a diferencia del caso afgano, esta vez el régimen yemení hizo más difícil para ellos partir hacia Irak; al gobierno tampoco le agradaba recibirlos a su regreso. Como resultado, los veteranos iraquíes y los estudiantes de los campos de entrenamiento afganos, incluyendo a los yemeníes, se vieron forzados a regresar a Yemen bajo identidades falsas. Muy pronto las preocupaciones del gobierno yemení se confirmaron: el regreso de los ex alumnos iraquíes a Yemen trajo consigo una oleada de ataques terroristas que podía amenazar la estabilidad del país. Los veteranos iraquíes, algunos de los cuales eran miembros de al Qaeda, vieron en Yemen una conveniente base para la adopción de ideologías islámicas radicalizadas y como un objetivo para ataques terroristas contra la presencia extranjera en la región.

A pesar del éxito al llevar a varias decenas de veteranos iraquíes –en su mayoría, miembros de al Qaeda- ante la corte, debe recordarse que sus actividades no habrían sido posibles sin el apoyo de la población local y de elementos en los sistemas militares y de seguridad en Yemen. Otro factor que permitió sus actividades fue la preferencia del régimen yemení de evitar una confrontación con los radicales islámicos. Esto puede verse claramente en la respuesta lenta y parcial del régimen al escape de veintitrés miembros de al Qaeda de la prisión de máxima seguridad en Sana, y en la deficiente cooperación con los agentes de Interpol en sus capturas.

El éxito en la guerra de la red mundial del terrorismo islámico es altamente dependiente del grado de cooperación de los países musulmanes con Occidente y en su firmeza en la lucha contra el terrorismo sin temer una confrontación con él. La guerra contra la red mundial del terrorismo islámico no puede dejarse solamente a Occidente, sino que debe ser también una misión de los mismos regímenes musulmanes que son considerados “infieles” a los ojos de los radicales musulmanes. Esta guerra debe tener lugar no solamente en la lucha contra los radicales mismos, sino también contra el apoyo de elementos dentro del país.
Notas:
[1]James, Bruce, "Arab Veterans of the Afghan War", Jane's Intelligence Review, Section: Middle East, Vol. 7, No. 4, (April 1995), p. 175; JIR estimó que overall, cerca de 14,000 árabes musulmanes participaron en la guerra en Afganistán: 5,000 sauditas, 3,000 yemeníes, 2,800 argelinos, 2,000 egipcios, 400 tunecinos, 370 iraquíes, 200 libios y varias decenas de jordanos.[2] Al-Sadiq, Al-Sulami, "Al-Watan tanshuru al-qissah al-kamilah lil-muqatileen al-Yamaniyeen fi Afghanistan (1-2)" ["Al-Watan Newspaper Publishes the Full Story of the Yemeni Warriors in Afghanistan (1-2)"], al-Watan (Saudi Arabia), (December 17, 2001). Al-Sulami escribió que la inteligencia egipcia tuvo éxito en 1993 en la escucha de numerosas conversaciones telefónicas entre Ayman al-Zawahiri, en Yemen, y miembros de su organización en Egipto, en las que los instruía para cometer ataques terroristas dentro de Egipto; Bruce, Ibid, p. 178. El periodista James Bruce, quien ha cubierto los asuntos de Medio Oriente durante más de veinte años, señaló que 'Abd al-Majid al-Zindani tenía gran participación en la influencia de los ex alumnos afganos que llegaban a Yemen, donde en los primeros años de la década de 1990 tenía lugar un notable incremento en el despertar islámico; Nash'at, 'Abd al-Maajid, "Mumarasat harakat al-Afghan al-'Arab wa-kharitat al-'unf al-siyasi" ("The Arab Afghans' Movement Experiences and the Political Violence Map"), IslamOnLine, (October 7, 2001); Sean, Boyne, "Islamic Leader threatens revenge", Jane's Intelligence Review, Section: News and Analysis, Vol. 11, No. 6, June 1999, p. 5; Shaul, Shay, The Terror triangle in the Red Sea, (Herzliya: IDC, 2004), p. 115 (Hebrew version). El orientalista Shaul Shay señaló que en los comienzos de 1990 al-Zindani era una de las figuras claves en la consolidación del Islam radical en Yemen.[3] "Akada ihbat muhawalat tafjir sabiqah bi-tamwil min za'im al-Qa'ida wa-itlaf malaffat al-tahqiq" ("Emphasized the Thwarting of Previous Bombing Attempts Sponsored by Leader of Al-Qai'da and obstruction in the Investigative Files"), al-Watan (Saudi Arabia), (October 19, 2001); Al-Sulami, Ibid; 'Abd al-Maajid, Ibid; B., Raman, "Attack on USS Cole: Background", ICT Articles, (October 16, 2000); Bruce, Ibid.[4] 'Abdullah, al-Hajj, "12 alf mutatarif yar'ahum Bin Ladin fi al-Yaman" ("12 thousand radicals receive patronage from Bin Ladin in Yemen"), al-Ahram al-'Arabi (Egypt), (April 5, 1997), pp. 26-27; Nabil, Sharaf al-Din, Bin Ladin - Taliban. al-Afghan al-'Arab wa-al-Umamiyyah al-Usuliyyah (Bin Ladin - Taliban. the Arab Afghans and the Fanatical Internationale), (Cairo: Maktabat Madbuli, 2002), p. 38; Scott, Macleod, "The Paladin of Jihad", Time, Vol. 147, No. 19, (May 6, 1996), p. 52; Shay, Ibid, pp. 115-118.[5] Al-Sulami, Ibid; 'Abd al-Maajid, Ibid; Bruce, Ibid.[6] Al-Sulami, Ibid; Bruce, Ibid; Esther, Webman, "It Was Written on the Wall - Usama Bin Ladin, the Man and his Deeds", Data and Analysis Series, (Tel Aviv: The Moshe Dayan Center for Middle Eastern and African Studies, 2002), p. 23 (Hebrew version); Peter, Bergen, "Bin Laden's warning. Smoke Signals", The New Republic, (September 24, 2001), p. 22; Raman, Ibid; Sean, Boyne, "Islamic Leader threatens revenge", Jane's Intelligence Review, Section: News and Analysis, Vol. 11, No. 6, (June 1999), p. 5; Yoram, Schweitzer and Shaul Shay, An Expected Surprise, (Herzliya: IDC, 2002), p. 111; Yossef, Bodansky, Bin Laden - The Man Who Declared War on America, (California: Prima, 1999), p. 374; Zayn al-'Abidin al-Mihdar fue ejecutado el 17 de Octubre de 1999 por el secuestro y asesinato de 16 ciudadanos extranjeros en Yemen en Diciembre de 1998 y por el establecimiento de una organización radical islámica cuyos objetivos eran amenazar la seguridad de Yemen; Para una revisión de los ataques terroristas más importantes en campo Yemení, comenzando con los ataques contra dos hoteles en Adén el 29 de Diciembre de 1992, y hasta el asesinato de los tres doctores americanos el 30 de Diciembre de 2002, véase Shay, Ibid, pp. 124-133.[7] Usama, Bin Ladin, "Declaration of War against the Americans Occupying the Land of the Two Holy Places - Expel the Infidels from the Arab Peninsula", Azzam Publications, (March 20, 2000).[8] "2 min al- 10 al-farrin min sijn al-amn al-siyasi bi-'Aden nafdhaa hujumayni fi al-'Iraq" ("2 out of 10 Escapees from the Political Security Prison in 'Aden Perpetrated Two Attacks in Iraq"), al-Ayyam (Sana), (July 30, 2005), p. 1; "Deep-rooted militancy shadows Yemen", Yemen Observer (Sana), (February 21, 2006).[9] "Two Yemenis arrested in Iraq for suspicion of links to Al-Qaeda", Yemen Times, (November 4, 2005).[10] "Deep-rooted militancy shadows Yemen", Ibid; "Yemenis, part of Iraqi resistance", Yemen Times (Yemen), (June 14, 2005); "Yemenis in Jihad", Yemen Times (Yemen), (February 23, 2006).[11] Jane, Novak, "Yemen's criminal enterprise", Yemen Times, (November 10, 2005).[12] "Yemenis, part of Iraqi resistance", Ibid.[13] "Al-Sheikh 'Abd al-Majid al-Zindani ya'tabiru al-talab al-Amriki bi-i'tiqalihi istikhfaf bi-istiqlal al-Yaman wa-i'tida' 'ala siyadatiha wa-yatlubu al-hukumah al-qiyam bi-wajibiha fi al-difa''an muwatineeha" ("Sheikh 'Abd al-Majid al-Zandani Considers the American Request for his Arrest as a Ridicule of Yemeni Independence and as an Assault on its Sovereignty and Demands the Government to Fulfill its Obligation to Defend its Citizens"), Yemeni Islah Party, (February 25, 2006).[14] El término “Veteranos Iraquíes” se refiere a voluntarios musulmanes árabes y no árabes que llegaron a Irak con el objeto de repeler a las fuerzas aliadas. Tras el colapso del régimen de Saddam Hussein, algunos se unieron a los mujaidines iraquíes, algunos de los cuales eran miembros de al Qaeda liderados por Abu Mus'ab al-Zarqawi, que sigue sus esfuerzos en repeler a las fuerzas aliadas de Irak. Algunos de ellos regresaron a sus países de orígen o volaron a otros países y recibieron así la etiqueta de Veteranos Iraquíes.[15] Khaled, al-Mahdi, "Yemen Jails Six Al-Qaeda Men for Plotting Attacks", Arab News, (August 9, 2005).[16] Muhammad Fari', al-Shaybani, "Al-Muttaham al-Ahdal: al-mabaaligh saraftu li-'awa'il Yamaniyeen Shuhada' fi harb 1994 wa-Afghanistan wa-al-Shishan wa-al-Bosna wa-al-Hersek" ("The Accused al-Ahdal: I Invested the Money in Yemeni Families of the Martyrs of the Wars of 1994, Afghanistan, Chechnya and Bosnia-Herzegovina"), al-Ayyam (Sana), (February 28, 2006), p. 8; "Trial begins for Al-Qaeda's number two man in Yemen", Yemen Times, (February 14, 2006); "Yamaniyun 'a'idun min al-'Iraq khatatu li-tafjir funduq 'Aden wa-ightiyal al-safir al-Amriki" ("Yemenis that Returned from Iraq Planned to Bomb Hotel 'Aden and Murder the American Ambassador"), Al-Bayyinah (Hizbullah in Iraq), (February 25, 2006); "Yemen puts senior al Qaeda suspect on trial", Reuters, (February 13, 2006); al-Ahdal fought in Chechnya and in Afghanistan and following the amputation of one of his legs he began dealing with funding Al-Qai'da terrorist operations, see, Mohamed, Bin Sallam, "Yemeni Al-Qaeda suspects transferred to court", Yemen Times, (January 24, 2006).[17] "Ta'jil muhaakamat 17 yashtabihu fi intima'ihim lil-Qa'ida bi-al-Yaman" ("The Delay of the Trial of 17 Suspects of Belonging to al-Qa'ida in Yemen"), al-Jazeera, (February 20, 2006).[18] Bin Sallam, Ibid; Khalid, al-Hamadi, "San'a: tanfidh al-i'dam fi qaatil al-'atiba' al-Amrikiyeen wa-tabri'at thalaathah muttahameen 'a'ideen min Ghwaantanaamu" ("Sana: the execution of the murderer of the American doctors and the exculpation of three suspects that returned from Guantanamo"), al-Quds al-Arabi, (February 28, 2006), p. 1; "Yemen puts senior al Qaeda suspect on trial", Ibid.[19] Riyad, al-Sami'i, "17 Yamaniyan wa-Sa'udiyan yumathiluna amam al-qada' bi-tuhmat tashkil 'isabah musallahah li-darb masalih wa-shakhsiyat Amrikiyyah fi al-Yaman bi-tawjih min al-Zarqawi" ("17 Yemenis and Saudis are Standing Trial Accused of Forming an Armed Group that Planned to Attack American Figures and Interests in Yemen Under the Guidance of al-Zarqawi"), Raynews (Yemen), (February 22, 2006); "17 muttahaman baynahum 5 Sa'udiyeen wa-'a'ideen min al-'Iraq tuwajjihu al-juz'iyyah lahum tuhmat al-takhtit li-qatl Amrikiyeen fi al-Yaman intiqaman lil-Harithi" ("17 suspects among them 5 Saudis and returnees from Iraq accused of plotting to kill Americans in Yemen in revenge for the killing of al-Harithi"), al-Sahwa (Yemen), (February 22, 2006); The twelve Yemeni defendants are: 'Ali 'Abdallah Naji al-Harithi (Abu 'Ali) (28), Jamal Sayf 'Abdallah al-Makrami (Abu 'Ubaydah) (38) - Abu 'Ali's right hand man, Ahmad Hazzam Muhammad al-Zahiri (Abu Mu'adh) (24), 'Abdallah Hasan Ahmad al-'Ibadi (Abu Muslim) (38), 'Ali Muhammad 'Umar 'Abdallah al-Bakri al-Kurdi (Abu Isra'il) (39), 'Abdallah Ahmad Muhammad al-Shajara (Abu al-Battar) (24), 'Ammar 'Abdallah Muhammad Fadil (Abu 'Asim) (28), Bandar 'Umar Hajjar al-Hasani (Aws) (24), Musa'id Muhammad Ahmad al-Barbari (27), Muhammad Sa'id Fari' al-Kabshi (Abu Ibrahim) (24), Muhammad Mabkhut 'Arfaj Hadban (Wajh al-Khayr) (30), Hasan 'Abdallah Muhsin al-Bayli (36). The five Saudi defendants are: Majid Ahmad Sa'id al-Zahrani (Abu Ahmad) (26), Muhammad Musayfar Raziq al-Qurashi (Abu 'Asim) (27), Muhsin Mubarak Mabkhut Bal'id (Abu Khattab) (19), Sa'id 'Abd al-Ghani Muhammad al-Balushi (Abu Muhannad) (26), Muhammad Fallah 'Ali Muqbil al-Qahtani (Abu Malik al-'Aryani) (22), see, Muhammad Fari', al-Shaybani, "Muttaham: al-Zarqawi arsalana ila al-Yaman kadhb… laqad darrabtu al-shabab li-yadhhabu ila al-'Iraq lil-Jihad" ("Accused: al-Zarqawi sent us to Yemen is a lie… I trained the guys in order for them to go to Iraq for the Jihad"), al-Ayyam (Sana), (February 23-24, 2006), p. 1.[20] An interview with Thomas Krajeski on CNN, AMERICAN MORNING, (January 25, 2006); "Yemenis that Returned from Iraq Planned to Bomb Hotel 'Aden and Murder the American Ambassador", Ibid.[21] "17 suspects among them 5 Saudis and returnees from Iraq accused of plotting to kill Americans in Yemen in revenge for the killing of al-Harithi", Ibid; al-Sami'i, Ibid; "Bad' muhaakamat 17muttahaman bi-tashkil 'isaabah musallahah tabi' lil-Zarqawi" ("The Trial of 17 Accused of Forming an Armed Group Belonging to al-Zarqawi has Begun"), al-Shoura.net, (February 22, 2006); según uno de los acusados, las armas estaban destinadas para el entrenamiento antes de su partida a Irak; véase: Muhammad Fari', al-Shaybani, "Al-Muttaham al-'awwal: nahnu la na'rifu ba'duna al-ba'd amma al-'i'tiraafaat fahiya min al-ta'dhib" ("The First Defendant: We Do Not Know Each Other and Regarding the Confessions They Were Forced Under Torture"), al-Ayyam (Sana), (March 2, 2006) p. 8.[22]"Al-Qaeda suspects in Yemen admit training Iraq fighters", Yemen Observer, (March 4, 2006).[23] Al-Sami'i, Ibid; al-Shaybani, “Acusado: que al-Zarqawi nos enviaba a Yemen es mentira... Yo entrenaba a los muchachos para que fueran a Irak por la Jihad”; “17 sospechosos entre ellos cinco sauditas y otros que regresaban de Irak acusados de complot para asesinar americanos en Yemen en venganza por la muerte de al-Harithi”, Ibid; "The Trial of 17 Accused of Forming an Armed Group Belonging to al-Zarqawi has Begun", Ibid.[24] Mohammed, Al-Asadi, "Killer of American Missionaries Executed", Yemen Observer, (February 27, 2006).[25] Novak, Ibid.[26]"Deep-rooted militancy shadows Yemen", Ibid.[27] Adel, Al-Haddad, "23 Al-Qaeda suspects escape from Political Security Prison", Yemen Times, (February 4, 2006); "Al-Tahqiq ma'a 4 min rijal al-'amn yushtabahu bi-tawatu'ihim fi hurub a'da' al-Qa'ida" ("The investigation of four security officials suspected of aiding the escape of Al-Qai'da members"), Raynews (Yemen), (March 1, 2006); "Faroon min sijn al-'amn al-siyaasi bi-San'a yusallimuna anfusahum bi-Hadramawt" ("The escapees from the political security prison in Sana turn themselves in to police in Hadramawt"),al-Ayyam (Sana), (March 7, 2006), p. 1; "Deep-rooted militancy shadows Yemen", Ibid. La lista oficial de los prisioneros sospechosos distribuída por el Ministerio del Interior consistía solamente en 22 nombres, excluyendo a Hamdi al-Ahdal. Los nombres son: Jamal Muhammad al-Badawi (uno de los ideólogos del ataque con bombas al USS Cole en Adén), Yaser Naser al-Homikani, Muhammad Sa'eed al-Omda, Fawzi Muhammad al-Wajeh, Zakria Hasen al-Baihani, Abd al-Rahman Ahmad Basora, Abdullah Ahmad al-Remi, Fawaz Yahya al-Rabeai (líder del grupo que cometió el ataque contra el buque petrolero francés), Hizam Saleh Mugli, Zakria Hasen al-Baihani, Abd al-Rahman Ahmad Basurah, Ibrahim Muhammad al-Hoidi, Ibrahim Muhammad al-Mukri, 'Arif Saleh Mugli, Shafik Ahmed Zaid, Jaber al-Bana, Hamza Salem al-Kuaiti, 'Umar Sa'eed Jarallah, Abdullah Yahya al-Wa'adi, Khalid Muhammad al-Batati, Kasim Yahya al-Remi, Muhammad Ahmad al-Remi, Mansour Naser al-Baihani.[28] Mohamed, Ghobari, "Al Qaeda jail escape seen as serious blow to Yemen", Reuters, (February 6, 2006).[29] "Deep-rooted militancy shadows Yemen", Ibid; Mark, Trevelyan, "Yemen al Qaeda debacle worries U.S. and Europeans", Reuters, (February 9, 2006).[30] Novak, Ibid; El orientalista Shaul Shay señala cuatro importantes factores que plantean problemas para el régimen yemení a la hora de hacerse cargo del terrorismo islámico: la estructura tribal dentro de la sociedad yemení impide la existencia de un gobierno central efectivo en regiones distanciadas de la capital; los líderes tribales influyentes manejan una política y un respaldo independiente, por razones financieras e ideológicas: la causa del Islam radical; existen allí grupos islámicos fuertemente radicalizados que gozan de un amplio apoyo nacional; y finalmente, un sistema corrupto de administración obstaculiza la efectiva supervisión de las actividades llevadas a cabo en el estado. Véase Shay, Ibid, p. 120.[31] "172 Al Qaeda suspects 'detained in Yemen jails'", Yemen Observer, (17 de Febrero de 2006).